Verba volant, scripta manent.

Balanza

Hasta que decidimos volver a colgarla en la pared pasaron cinco años. Cada día de esos cinco años que lo intentamos fue un intento fallido.
-La muerte pesa demasiado para colgarla en el salón-, me decía mirando la foto de nuestro hijo desaparecido. Yo le observaba y no veía más que a un padre derrumbado; ya no quedaba nada del marido seguro de si mismo, alegre y optimista que había conocido.
Le di  el martillo y la alcayata, y encajé  la pena como pude, en la caja de herramientas.
Todavía hoy, veinte años después de aquel día,  me pregunto si al final pesa más la muerte…o la vida.





2 comentarios:

  1. Lo bello de sentir el peso de la muerte es saber que eso ocurre porque estamos vivos.
    Me encanta este micro.

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  2. Gracias Piel. Es un despojo del REC, tú ya lo entiendes...
    ;)

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GRACIAS por tu comentario.

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